Hay muchas cosas que no hay que mezclar con alcohol por que el resultado puede ser un tanto desagradable, por ejemplo con conducir un coche, practicar un deporte o jugar World of Warcraft. Sólo echen un vistazo a la escena del crimen: una madre semi-inconsciente y su hijo tirados en el suelo, un abuelo agitado con arma en mano y un tipo con un tiro en la cabeza… ¿qué diablos pasó aquí?

James Swan es un hombre de 27 años de edad que vivía con su madre (algo así como Howard Wolowitz de The Big Bang Theory). Una noche, por ahí de las 10 p.m., Swan se encontraba jugando WoW al tiempo que se tomaba unas cervezas, el problema radicó en que tenía el volumen de sus bocinas un tanto alto y no dejaba dormir a sus 5 hermanos menores, por lo que su mamá le llamó la atención ordenándole que bajara los decibles porque había que dormir.

Swan se negó, su madre insistió, y el asunto se salió de control. James Swan entró entonces en modo berserker y tomó a su madre por el cabello para terminar lanzándola a la cama. Lo mismo le pasó a uno de sus hermanos menores, quien trató de ayudar a su madre pero fue abatido ante la ira incontrolable de Swan. Cuando la mamá recuperó el piso, corrió al teléfono para llamar a la policía pero se vio tacleada y derribada una vez mas por su ebrio vástago. Esta vez Swan se aseguró de arrancar el teléfono de su lugar para luego impactar repetidamente su propia cabeza contra la superficie donde yacía el aparato.

A estas alturas a Swan ya no le importaba si terminaba asesinando a su propia madre, lo que quería era… bueno, no sé en que rayos estaría pensando. Al estar ella al borde de la inconsciencia, el abuelo entró en escena para detener toda esa locura, lo que hizo que Swan decidiera que el abuelo también tenía que pagar con su vida. El viejo no lo pensó dos veces y fue rápidamente por su revólver. Al verlo, Swan de abalanzó sobre él iniciando así una lucha a muerte entre un nieto y su abuelo. Luego de unos momentos de intensa refriega, el arma hizo lo suyo, impactando una bala en la cabeza de Swan que luego rebotó en su cráneo y abandonó el lugar a través de una ventana. Afortunadamente para Swan la bala sólo lo hirió, luego de esto lo llevaron a un hospital donde se negó a ser atendido, para después ser encerrado en prisión.

La noche no pudo ser mas entretenida.

Vía | True Crime Report