Pero no se trata de una almohada común, sino de una dakimakura, que son como las almohadas comunes pero largas, del tamaño promedio de una persona y comúnmente con la imagen impresa de una sensual personaje de anime o manga. Actualmente son artículos bastante populares entre los adolecentes nipones, y no hay mucho misterio en el por qué*.
Sucede que Lee Jin-gyu, el demente novio, se enamoró perdidamente de su almohada con el personaje de anime Fate Testarossa y al parecer la almohada le correspondía su amor. Iban a pasar el rato en el parque, se paseaban en los juegos mecánicos de la feria… ustedes saben; así que pasó lo que siempre pasa cuando una persona y una almohada se aman tanto: el matrimonio.
Honestamente la noticia no me pareció extraña en lo absoluto, considerando que estamos hablando de Japón, me pregunto si existirán otakus mexicanos o de alguna otra parte de latinoamérica que se atrevan a realizar semejante teatrito. Meh, seguro que los hay.
Aquí pueden ver un video de la feliz pareja en un día normal y haciendo actividades normales propias de una pareja de novios normal en un ambiente social totalmente normal.